Ver la realidad desde otra perspectiva
No soy un humorista, si un guionista de humor. Son dos cosas completamente distintas. Para ser humorista se necesitan histrionismo, presencia escénica, verborragia, feeling con el público y algún que otro condimento que me estoy olvidando. Para ser un guionista de humor solo se necesita una computadora con un procesador de texto o en su defecto papel y lapicera y sentido del humor. Solo eso. El humor no es otra cosa que ver la realidad desde otra perspectiva. El guionista de humor es un agudo observador que re interpreta los hechos de la sociedad y los expone, primero frente sí mismo y luego frente al televidente. El humor no se aprende, es un estado perceptivo, ser un buen humorista sí, necesita entrenamiento, práctica, disciplina.
Mientras que el humorista debe lidiar día a día con una platea y esforzarse cada vez más en mejorar su perfomance, el guionista de humor solo debe concentrarse en lo que está escribiendo encerrado en su cubículo de trabajo. El margen de error es menor en relación al humorista, solo es necesario entender lo que significa escribir en clave de humor. Una vez que se encontró la llave, las cosas se alivianan y redactar guiones con contenido humorístico pasa a ser espontáneo.
Si hay algo que aprendí luego de guionar para «El show de videomatch» y «Bendita TV»
es que el humor es parte de uno, está ahí dormido, aletargado por las erróneas formas que tenemos de apropiarnos de la realidad. Escribir con humor es un poco como el pensamiento lateral, esa forma de ver y entender el mundo desde el otro lado. Claro, me olvide de algo, no todos tienen esa sensibilidad y pueden encontrar el camino rápidamente, solo es cuestión de tiempo, el humor los está esperando, anímense, prueben, quizá con la reiteración en la práctica, se vuelvan adictos.