«Uno puede hacer cualquier cosa que se proponga.
A veces bnecesitas más tiempo, más esfuerzo
o más dinero, pero al final siempre lo consigues…»
Nacido en 1935 en Berlín hizo su aprendizaje como fotógrafo para posteriormente aprender dirección de cámara en la emisora de radio y televisión Südwestfunk en Baden-Baden. Gracias a su amistad con el director Peter Lilienthal se incorporó como docente en 1968 a la recién creada academia berlinesa de cine y televisión. Las discusiones con los estudiantes, la vivencia de las confrontaciones del movimiento estudiantil, así como la libertad para experimentar que ofrecía la escuela superior de cine terminaron siendo para Ballhaus experiencias extraordinariamente fructíferas en su trabajo con la cámara.
Ballhaus ideó junto con Fassbinder en 1973 durante el rodaje de Martha, el legendario desplazamiento de cámara en 360 grados, en el que la cámara se va moviendo circularmente alrededor de los actores. Este procedimiento llegaría a convertirse luego en su signo distintivo.
Ballhaus emprendió una nueva carrera en los EE.UU. a principios de los años 80. Su primera película en este país, Dear Mr. Wonderful, la filmó junto al director Peter Lilienthal y a un equipo integrado completamente por americanos. En películas como After Hours y GoodFellas hasta llegar a Gangs of New York Ballhaus fue revelándose como un plasmador congenial del mundo de imágenes de Martin Scorsese. Fue así como llegó a convertirse en uno de los camarógrafos más solicitados de Hollywood.
Ballhaus trabajó en los EE.UU. no sólo con Scorsese sino también con directores como John Sales, James Foley, Paul Newman, Peter Yates, Jim Brooks, Frank Oz, Steve Kloves, Francis Ford Cóppola, Wolfgang Petersen, Robert Redford y Mike Nichols.
Ballhaus cultiva una marcada preferencia por la cámara emplazada sobre rieles pero ha sabido perfeccionar también de forma sorprendente los desplazamientos de tipo Steadycam. En el empleo de la cámara manual opta siempre por dejarla «respirar». Maneja a la perfección el efecto de vértigo que se logra al retirar la cámara pero acercando al mismo tiempo la imagen mediante la lente zoom. En un solo plano Ballhaus hace hasta cinco aperturas del diafragma de la cámara y en algunas escenas recurre a veces al Speed-Change, mediante el cual se puede aumentar o reducir la velocidad con la que corre la cinta. En estas técnicas – siempre subordinadas a las historias narradas – consiste la singular estética de Ballhaus.
Se suele sostener que una película de Ballhaus parece siempre más cara de lo que realmente fue.
Ayudó a crear el ambiente terrorifico y aterrador que domina la adaptación de Drácula de Francis Ford Coppola.
Fotogramas de los films: Pandillas de Nueva York, After Hour, La última tentación de cristo, Los fabulosos baker boys y La edad de la inocencia y Drácula: