Luca Bigazzi

DIRECTOR DE FOTOGRAFÍA LUCA BIGAZZI: “EL CINE ES UNA GRAN ARMA DEL CONOCIMIENTO”

Publicado originalmente en el Diario PANORAMA en junio, 2017.

Daniela Bracho  1 de junio 2017

A Luca Bigazzi (Milán, 1958) no le faltan elogios por su “estilo” en la dirección de fotografía, aunque a él no le gusta hablar de estilos ni encasillarse en alguno. Afirma que trabaja en favor de cada película a la cual se entrega y que en ningún momento es el ego quien dicta el concepto visual. Desde hace 15 años es la llave maestra del director italiano Paolo Sorrentino, quien en 2014 alzó su Óscar a mejor película extranjera con La gran belleza, hecho inesperado que expuso su obra ante el mundo.

¿Cómo es trabajar con Paolo Sorrentino?

L.B. Las consecuencias del amor (2004) fue la primera colaboración con Sorrentino. El encuentro entre ambos fue posible gracias al productor y amigo en común, Nicola Giuliano.

Al iniciar el rodaje, las discusiones con el director fueron intensas y constantes, ya que pedía planos o estilos de iluminación que parecían imposibles: Me di cuenta de que, si quería trabajar con él, tenía que olvidar todo lo que yo pensaba imposible, y prepararme para cualquier cosa. Es lo que he hecho durante los quince años siguientes y me ha hecho un mejor director de fotografía, más rápido y más atento a todas las peticiones, también impredecible, tanto de Paolo y de todos los directores con los que he trabajado después”.

Sorrentino es un realizador impredecible y muy exigente. Lo he podido comprobar estando a su lado en el rodaje de seis películas –las más recientes, La gran belleza y Youth–, y una serie, The Young Pope, producida por Sky y con colaboraciones de HBO.

No tiene un storyboard, pero sí una lista muy precisa de planos que querrá hacer cada día. Es una lástima que esta lista no se la muestre a nadie. Es un mecanismo que le permite cambiar de opinión en función de la escena y el actor, y exige a todos los colaboradores estar preparados para cualquier eventualidad.

En el caso de mi trabajo, me inspira, por ejemplo, a armar una iluminación que funcione a 360 grados, sin abarrotar de trípodes el set, que pueda permitir el uso también de más de tres cámaras simultáneamente. Un reto difícil pero muy interesante, moderno e innovador. Todo ello combinado con una velocidad de realización vertiginosa. 40/50 planos por día son normales para Paolo. Un acuerdo con respecto a la realización de una película que ahora comparto en su totalidad. Lo cosa más importante es la película, no el éxito personal en la fotografía”.

Captura de la película La gran belleza.

 

¿Cómo construye la propuesta visual de una película?

L.B. Paolo y yo nos conocemos muy bien, nuestra relación es de pocas palabras y de comprensión no verbal. El momento de las inspecciones antes del rodaje es fundamental. Aunque últimamente estoy convencido de que las pequeñas pistas son a veces más importantes que las palabras. Una fase muy interesante es cuando nos encontramos en su oficina, por primera vez, antes de abordar una nueva película. Las fotos que se cuelgan en la pared detrás del escritorio del director, que a veces dicen mucho sobre sus intenciones, más que mil palabras.

Puede pensarse que la rigidez impera en el ritmo de trabajo en el set. Y aunque las jornadas son muy rigurosas, la improvisación, de la mano de un buen concepto definido, son más que suficientes para realzar cada escena que se esté grabando.

Yo creo, y sé que Paolo está de acuerdo conmigo, que la improvisación combinada con una idea clara de cómo será el sistema visual de la película, es el aspecto fundamental de la filmación (…) Las películas no son una evidencia científica, no existe el concepto correcto o incorrecto, hay un grado de aproximación a la historia, el guion. Los errores aparentes a veces son una fuente de sorpresas inesperadas. Muchas veces he pensado que lo que creía que estaba mal en determinado momento, luego me pareció mejor y más favorecedor porque era algo nuevo, inesperado y original”.

¿Podría definir su estilo?

L.B. Lo que más me entristece es cuando alguien más, pensando en hacer un cumplido, a la salida de una película en la que colaboré dice “yo no sabía que usted había hecho la fotografía, pero reconocí su estilo de inmediato”.

Captura de la película La gran belleza.

No tengo un estilo, tengo algo que me gusta o que no me gusta, soy un colaborador del director al servicio de películas. Sólo me gusta lo que creo que es fiel al guion, cada vez diferente y sorprendente e intento adaptarme a eso. El cambio del tiempo, la estética de la luz, la elección de la óptica y la cámara. La curiosidad, ser ecléctico como sea posible, rápido y flexible,  son las características que debe tener un director de fotografía no egocéntrico. Espero serlo, sobre todo después de conocer a Paolo.

¿Cómo fue la realización de la escena inicial de la fiesta en La gran belleza? 

L.B. Es un film político, de crítica social. Todo el mundo pensaba que habíamos querido mostrar la belleza de Roma, cuando la intención de Paolo era hacer una película sobre la deformación que los años “berlusconiani” han traído a nuestro país. El aspecto formal era importante, pero la iluminación realista (natural), que yo prefiero, se pasa a un segundo plano. Muchas escenas de La gran belleza tienen luces vulgares y violentas, así como vulgar ha sido la transformación social que sufrió Italia en aquellos años.

No quisiera vivir en un país como está descrito en esta película, corriendo y gritando. Afortunadamente, Italia ha mejorado en parte, y el contraste entre la belleza del país y la vulgaridad de sus habitantes ahora es menos irritante en la actualidad”.

El cine es un medio poderoso de interpretación de la realidad, es una gran arma del conocimiento. Es una pasión que he vivido desde la juventud y que he aprendido de manera autodidacta. La escuela ha sido el set mismo. No creo en los galardones y tampoco me fío de los críticos de cine. Solo me fía del arte mismo, que reinterpreta la realidad y la llena de sentido.

¿Qué sensación le queda al finalizar el rodaje de una película?

L.B. No puedo esperar para empezar la siguiente. Este trabajo es mi pasión. Este trabajo es mi vida, porque es el mejor del mundo. Es una obra de arte creada colectivamente. ¿Qué podría ser más hermoso en la vida?”.

Captura de la película La gran belleza.

 

Captura de la película Youth.

 

Captura de la película Youth.