La Freire | sobre los dichos de Tolchinsky
Desde La Freire, organización estudiantil de la Escuela de Ciencias de la Educación, integrante de Estudiantes al Frente, Centro de Estudiantes de la Facultad de Filosofía y Humanidades (UNC) solicitamos que el Consejo Asesor tome conocimiento de los dichos expresados en la nota publicada por Canal 12, del periodista Federico Tolchinsky
En la misma, entre otras cosas, se menciona que: “[…] muchos manuales y planes de estudio tienen un fuerte sesgo ideológico, que buena parte de los planteles docentes adoptó como propio. Y que inoculan a alumnas y alumnos en un contexto de relación asimétrica donde la refutación parece imposible. Incluso poner en cuestión contenidos así entraña riesgos. Ya sea en el aula o en la modalidad a distancia.”
Como estudiantes de Ciencias de la Educación y estudiantes militantes universitarixs, no podemos hacer caso omiso al peligro que subyace en los discursos que pregonan la fantasía apolítica en la educación.
Cualquier estudiosx de nuestro campo sabe que hablar de neutralidad es una falacia, pues siempre existen convicciones éticas y políticas que impregnan las prácticas educativas, escolares y pedagógicas. La misma génesis de nuestras escuelas ocurrió cargada de fuertes pretensiones liberales para la construcción de los Estados Nacionales y democráticos. Proceso que Federico parece no tener conocimiento.
No obstante, entendemos que lxs funcionarixs encargadxs ya deberían saberlo, y lo saben, empero optan por tergiversar el conocimiento. Cuando se trata de postulados meritocráticos y privatizadores que fomentan el negocio educativo del que forman parte, a pesar de las terribles consecuencias visibles, miran al costado y se encargan de repartir culpas a lxs docentes que ponen el cuerpo y tiempo a disposición de lxs estudiantes. No es casualidad que cite al ministro de Educación Walter Grahovac, quien planteo que “Las escuelas no son para militar”, en consonancia con los dichos de Soledad Acuña sobre que “los maestros eligen militar en vez de hacer docencia”.
Se habla de adoctrinamiento, cuando se fomenta la construcción democrática y la participación ciudadana, cuando se da voz y decisión a lxs estudiantes, cuando desde la institución se reconoce a lxs estudiantes como sujetxs activxs y de derecho, capaces de transformar la realidad y co-construir la cultura escolar.
Por ello, es que adheriremos a militar en las escuelas, militar a hacer docencia, militar a hacer(nos) estudiantes: por un reconocimiento propio, ajeno y colectivo de nuestra ciudadanía. Luchar por una realidad más justa y remarcando que toda educación es un acto político. Al mismo tiempo que la existencia de diferentes posicionamientos e ideologías es condición determinante para el funcionamiento de cualquier sistema político democrático. En las aulas y fuera de ellas es necesario poner sobre la mesa herramientas de emancipación y formación. Es de vital importancia que no hagamos caso omiso al peligro que acarrean dichas narrativas porque tenemos memoria y reconocemos que de igual manera comenzaba la represión y persecución política en los tiempos oscuros de dictadura.
No toleraremos narrativas que se argumentan desde juicios de valor, nadie “flagela” ideológicamente a nadie en las aulas. El “flagelo” del adoctrinamiento en las aulas lo vivieron lxs compañerxs desaparecidxs por luchar por lo que creían justo y en contra del régimen autoritario. Muchxs de esxs compañerxs pertenecieron a la Escuela Superior de Comercio Manuel Belgrano, a la cual se acusa en la nota a sus estudiantes y su gremio. Se lxs interpela directamente, se lxs cuestiona olvidando que los Centros de Estudiantes son electos democráticamente por voto directo de lxs estudiantes y jamás dejaremos de lado nuestras convicciones de que como tales, somos sujetos activos, capaces de transformar la realidad y construir nuestros propios posicionamientos en pos de lo que creemos justo para nuestras democracias e instituciones educativas.